Más que un hotel… Es un lugar con un pasado y una historia que contar.

Dos décadas después, La Fonda se convirtió en el primer restaurante con una estrella Michelin de Marbella y era el lugar de encuentro de la jet-set internacional, intelectuales, artistas y aristócratas, lo que impulsó el desarrollo turístico de la ciudad.

A finales del siglo pasado, La Fonda quedó en el olvido, mientras la naturaleza crecía tras sus puertas.

Los tres edificios históricos que constituyen La Fonda datan de principios del siglo XVI y abarcan los patios y jardines internos. Los equipos de La Fonda trabajaron meticulosamente para preservar los hallazgos, reforzando paredes y arcos antiguos y restaurando las características originales descubiertas que incluyen murales y frescos del siglo XVIII.

Se conservó la mayor parte de la estructura original entre las que destacan las dos torres con vistas de 360 grados de Marbella, las grandes columnas, los magníficos arcos e incluso los antiguos y hermosos ficus, en torno a los cuales se ha rediseñado La Fonda.

Combinando estas características originales con un diseño moderno, sofisticados muebles, vegetación exuberante y avanzada tecnología, La Fonda renace combinando pasado y presente, convirtiéndose en una de las joyas de Marbella.

Baldosas tradicionales se encaran a paredes de vidrio ofreciendo una decoración actual y sofisticada. Los magníficos arcos se abren a exuberantes claustros con árboles centenarios que se elevan a través del hotel, ofreciendo sombra a los encantadores patios donde los huéspedes saborean un café bajo los primeros rayos de la mañana.